Nuestras palabras nos definen, nos acotan, nos dibujan. Limitan la manera cómo vemos el mundo y deciden nuestra actitud y nuestros pensamientos. Con ellas construimos nuestro día a día, son el material que usamos para poner nombre a nuestros sueños y a nuestros miedos… Dibujan nuestro mundo… Somo las palabras que decidimos escuchar y leer. Las que guardamos en la memoria y aún nos arañan. Las palabras generan emociones y las emociones son lo que nos construye… Escojamos bien nuestras palabras.