sunlight-2606451_640

Porque me quiero, dejo de creerme tus mentiras… No me las creía, lo sé, pero jugaba a soñar que eran verdades para soportar la idea de dejarme engañar por amor… Y ahora me doy cuenta de que ni siquiera es por amor, es por necesidad, por dependencia…

Porque me quiero, voy a dejar de seguirte y rondarte. Ya no tienes nada que yo busque, no ha estado en ti nunca mi paz ni mi alegría… Estaban las ganas de que alguien como tú me quisiera y aceptara, porque necesitaba sentirme amada y valiosa, porque soñaba que alguien como tú a quién creí mejor que yo dijera en voz alta ante el mundo que soy maravillosa…

Porque me quiero, ya no me importa que no me veas ni me sientas hermosa. No espero tu asentimiento ni anhelo tu aprobación… No suplico tu mirada de deseo ni huyo de tu rechazo… Porque mi calma no depende de tu calma ni mi felicidad depende de tu risa cuando te cuento historias… Ya no te cuento historias porque me he dado cuenta de que no quería en realidad compartirlas contigo sino que me dijeras que tenían gracia, que te interesaban… Me he dado cuenta que quería tener historias que contarte porque quería que creyeras que era alguien mágico y que tenías suerte estando a mi lado…

Porque me quiero no te mendigo caricias ni migajas de beso robado a tu mal humor y tus «no tengo tiempo» y «ahora no» que es nunca… Dejo el equipaje que compartimos juntos junto a la cama y abro la puerta de mi propia conciencia para salir de ti y encontrar mi lugar. Ya basta de palabras prohibidas, de respiraciones entrecortadas, de domingos de llanto contenido, de mirar al sol y no ver el sol porque tus ojos me nublan y yo me dejo… Siempre es porque me dejo que llamas a mi puerta y cuando abro echas tu basura en mi cara… Porque me quiero, quedará cerrada siempre mientras curo mis heridas y me bautizo con risas y hermosas palabras…

Porque me quiero ya no esperaré nunca nada de nadie que antes no me sepa dar yo misma… Nada habrá ahí afuera que yo necesite como el aire más que mi propia autoestima, más que mirarme y decirme «ahora sí que me siento y me noto y sé que estoy entera», más que saber que piso dónde sueño y que nunca dependeré de nadie para ser feliz…

Porque me quiero… Ya no necesito encajar en tus moldes ni parecerme a tus musas, porque ahora me inspiro sólo a mí.

Porque me quiero, miraré al cielo y amaré la lluvia si toca. Y besaré cada gota que caiga en mi cara y sabré que soy mi sol y sabré que escojo mi destino cada vez que decido que no me supedito a nadie, a nada… Y con todos mis fallos me haré un vestido precioso que llevaré puesto, porque gracias a mis desatinos habré descubierto que mientras luchaba por parecer ya era… Que mientras soñaba con llegar a mi absurda meta de perfección ya era perfecta, que mientras lloraba porque no me aceptabas, lo único que realmente necesitaba era decirme yo que sí…

Porque me quiero, no voy a perder un minuto más de vida y magia recordando gritos y caricias falsas y preguntándome por qué… Lo que importa es para qué me levanto ahora y tengo claro que es para mí…

Porque me quiero y me sobran excusas y no necesito razones para amarme y sentirme… Voy tarde en esto de quererme y necesito pista para aterrizar en mí y cubrirme de besos y darme alegrías… Y ahora, salgo, porque llevo demora y me tengo ganas. me siento maravillosa y voy a disfrutarme ahora, sin más miedo al miedo y las miradas…